Espinos y perretxikos asoman por no ser menos

 Espinos y perretxikos por no ser menos que los narcisos


    Por no ser menos que los narcisos, aunque a menor altitud, en las aldayas, espinos y perretxikos han dado un paso al frente para despedir al invierno. Aunque dicen que nunca se sabe si se ha ido del todo, pero es buena señal. 

    Y yo, que ya no puedo estar sobre el terreno me siento muy reconfortado cuando algún amigo me presta sus ojos, para que yo pueda ver lo que él ve por mí. Y agradezco desde aquí, como lo he hecho personalmente, el que me brindéis la posibilidad de asomarme a los parajes que tanto amo y de revivirlos. Y de permitir que otros lo hagan.  

    Porque es grato, es bello y es aleccionador ver renovarse el ciclo de la vida, en las personas y en la naturaleza. Quizá imprescindible en ambas. 


 

Nace en 1791, con raíces amescoanas, el Duque de Rivas


Nace en 1791, con raíces amescoanas, el Duque de Rivas

Ángel María de Saavedra, "el Duque de Rivas"
Gabriel Maureta Aracil , Dominio público, vía Wikimedia Commons

Ángel María de Saavedra y Remírez de Baquedano, VII marqués de Andia, nace en Córdoba el 10 de marzo de 1791.

Más conocido en la literatura como ‘Duque de Rivas’, que alcanza la fama como dramaturgo, poeta e historiador. Fue, además, político y estadista.

Ingresa en la milicia en diciembre de 1806 y resultó herido en la guerra contra los franceses en 1810.

En esas fechas se inicia en la poesía y en 1814 publica su primera obra.

En 1822 entra en la política, como diputado por Córdoba. Vota en 1823 la destitución temporal del monarca, Fernando VII. Es por ello condenado a muerte y huye a Londres.

Permanecerá exiliado hasta ser amnistiado en 1834, tras fallecer Fernando VII en 1833.

En marzo de 1835 estrena en Madrid su obra universalmente conocida Don Álvaro o la fuerza del sino.

En 1836 es Ángel de Saavedra ministro del Interior.

Tras el fallecimiento de su madre, en 1848, y no habiendo sobrevivido su hermano mayor, Juan Remigio, fallecido en 1834, accede al título de duque de Rivas, marqués de Andia y marqués de Villasinda. 

Durante 16 años fue propietario titular del palacio de Urbasa que, probablemente, nunca visitó.

Sigue en la política y en la actividad literaria hasta su fallecimiento, ocurrido en 1864.

 
         Para saber más del Palacio de Urbasa

GARCÍA DE ALBIZU, Balbino (2022), «El palacio amescoano de Urbasa. Del nacimiento a la agonía», en Conociendo el pasado amescoano, VII, Pamplona: Lamiñarra, pp. 15-102.



 

Mari Paz y las florecicas de San José


Cuando subíamos a finales de marzo o primeros de abril a dar una vuelta por Lezamen o por Arafe arriba, dejábamos el coche, junto a la txabola de Mari Paz Elizondo. El “Vitarica” le llamaba Mari Fernández de Arroyabe, hijo de Mari Paz, al Suzuki Vitara que fielmente nos acompañó durante más de veinte años de recorridos.

Siempre volvíamos con el placer de haber dado un buen paseo, aunque frío como correspondía a la época y lugar, si el tiempo había sido un poco piadoso, volvíamos además con los primeros narcisos.

 Siempre que eso ocurría, le dejábamos un ramico a Mari Paz. Y ella, hubiera narcisos o no, a los que llamaba “florecicas de San José”, siempre nos obsequiaba con una sonrisa y con una rato de grata y afable conversación.

Mari Paz ya no está, nosotros ya no podemos hacer esos recorridos, pero queda la memoria y la imagen.

Me acaba de mandar Carlos García Íñiguez un testimonio gráfico de que los narcisos ya han cumplido con su deber anual. Eso nos ha traído a la memoria  momentos gratos de recordar y lo hacemos.

                   No se puede vivir de recuerdos, 

                   pero no se puede vivir sin ellos. 





 

Etnografía 001, Réquiem por las tijeras de esquilar




Inauguro una nueva sección en este blog, muy relacionada con nuestra cultura. A la velocidad a la que discurren y se imponen los cambios de hábitos, técnicas, usos, útiles, instrumentos, quedan en el olvido los que les precedieron. Y con frecuencia, no es que se olviden, es que no llegaron a ser conocidos por personas más jóvenes que nosotros.

Todo ese conjunto dice tanto de nuestro pasado como nuestra historia. Y a la par, saco a la luz pequeños episodios de nuestra pequeña historia, intrahistoria le han llamado también.

No me enrollo más, ni lo he pensado mucho. Mi elección para estrenar esta sección recae sobre las “Tijeras para esquilar ovejas”.


Aunque las primeras ovejas, hace 8.000/10.000 años, no tenían lana como las actuales, sí propocionaban carne y leche.Y progresivos cambios y cruces dieron lugar a razas lanosas, susceptibles de proporcionarla.

La lana era extraída mediante peines metálicos de bronce ya hace unos 4.000 años, de lo que hay testimonios fiables.

Siglos más tarde nacían las tijeras de muelle, con diseños similares a las empleadas actualmente.

Fueron utilizadas en Roma y desde la Edad Media, en toda Europa. Y más tarde, en América y Australia.

Esquilado de ovejas. Breviarium Grimani. Detail. 
Foto de archivo. De Wikimedia Commons.
Gerard Horenbout, Alexander & Simon Bening. Venedig, Biblioteca Marciana

Su uso ha alcanzado el siglo XX para ser sustituidas en él, progresivamente, por las esquiladoras mecánicas cuyo uso se había iniciado a finales del siglo XIX.

En la segunda mitad del siglo XIX, un irlandés,  Frederick York Wolseley, emigrado a Australia para trabajar como pastor de ovejas en 1854, diseñó y perfeccionó, entre 1870 y 1890, la primera esquiladora automática. Este modelo se implantó rápidamente en Australia y se fue extendiendo a América y, en formato, más reducido, a Europa, sustituyendo al esquilado con tijeras.  


A comienzos del siglo XXI, las tijeras de esquilar siguen en uso, pero ya con carácter excepcional. Quedan reservadas para los carneros y se usan para las ovejas en algunos países fríos donde no se pretende desproveerlas totalmente de lana, a fin de que tras el corte conserven cierto abrigo.


  • El panel de cabecera utiliza iconos de game-icons.net  bajo CC BY 3.0
  • Concretamente: “Impacto de yunque” y “Aguja de coser” de Lorc
  • “Molino de agua” de Caro Asercion y “Hacha en tronco” de Delapouite


 

El Mayo en San Martín de Améscoa


En el primer trimestre de 1997 dimos en Arantzaduia94 por terminada la tarea de investigación sobre el ritual del Mayo en Améscoa.

Ya habíamos recopilado información suficiente como para divulgarla y ampliar así el conocimiento de la propia cultura. Y para que quien quisiera servirse de ella para recuperarlo, pudiera hacerlo.

Reunimos lo que alcanzamos a saber de Larraona, San Martín y Zudaire y lo publicamos en un medio de divulgación muy rústico, “Te vas a enterar”, que no eran sino fotocopias que distribuíamos de mano en mano.

Y no se les cayeron los anillos por escribir en aquel medio prehistórico a Jimeno Jurío y a Aguirre Sorondo. Y yo me hice cargo de refundir y redactar toda la información recogida sobre el Mayo de San Martín.

Y así lo conté en 1997.


Ver el documento completo.



Efemérides 006: Gonzalo de Baquedano testó en 1426 y fundó linaje

Gonzalo de Baquedano testó y fundó linaje en 1426





Imagen, obtenida en la década de los ochenta, del lugar de enterramiento
 del matrimonio en las ruinas de la iglesia de santo Domingo (Estella). 

En su testamento dispuso que él y su esposa, Teresa Alfonso de Palomeque, de una familia de la nobleza de Toledo, fueran enterrados en la la iglesia del monasterio de Santo Domingo de Estella.

Al testar, nombraba heredero a su hermano Sancho de todos sus bienes en Ecala, San Martín, Baquedano, Ganuza, Arteaga y Mues. Lo que ocurrió tras su fallecimiento en 1428.

Su esposa fue igualmente sepultada tras su muerte años más tarde.

Los descendientes de su hermano Sancho habitaron en Ecala y San Martín y uno de ellos, Diego Remírez de Baquedano, obtuvo en 1695 el marquesado de Andia y Urbasa y sería el último de este linaje en morar en el valle.

La tapa del sarcófago existente en el arruinado convento e iglesia de Santo Domingo de Estella, con la estatua yacente que representa a la esposa de Gonzalo de Baquedano, pasó al Museo de Navarra.  La Comisión de Monumentos de Navarra hizo una petición para que fuera retirada de las ruinas y llevada a Pamplona en 1910, donde puede verse. 


          Para saber más de los Remírez de Baquedano:

GARCÍA DE ALBIZU, Balbino (2022), «El palacio amescoano de Urbasa. Del nacimiento a la agonía», en Conociendo el pasado amescoano, VII, Pamplona: Lamiñarra, pp. 15-102.







 

Miradas y reflexiones 014: "Es propio de hombres de cabezas medianas...


 “Es propio de hombres de cabezas medianas embestir contra todo aquello que no les cabe en la cabeza.” 

“Buru ertaineko gizonek buruan kabitzen ez zaien guztiari eraso egin behar diote”.

Antonio Machado (Sevilla, 1875-1939)



El Crucifijo/Kruzifizio de Zudaire

El Crucifijo/Kruzifizio de Zudaire

Foto de la cruz y la pirámide superior 
con el cresterío de la sierra nevado al fondo

  Crucero gótico de piedra atribuido al siglo XVI, situado en la actualidad junto a una curva pronunciada de la carretera Estella-Olazagutia, entre los kilómetros 15 y 16,  en Zudaire y en la parte alta del núcleo urbano a la bajada de Urbasa.


Fotografía del crucero a la entrada de Zudaire 
desde Urbasa. Cedida por Juan Carlos Urra

   Su actual posición la ocupa solo desde comienzos del siglo XX. Según la documentación consultada y el recuerdo de varios de los informantes, su traslado es relativamente reciente (en el siglo XX). Antes, estuvo situado en el camino del Puerto Viejo, junto al llamado Roble del Centinela y más arriba y al norte de su emplazamiento actual.

Desde la Iglesia Parroquial de San Andrés hasta el primitivo emplazamiento del crucero, se colocaban "las cruces" para la celebración del Via Crucis. Eran éstas de madera y dicen que alguna de ellas se mantenía en su sitio hasta hace algunos años (información recogida en encuestas verbales hechas en Zudaire entre 1980 y 1993).

El hecho de estar al aire libre en lugar accesible y visitable me ha movido a incluirlo en las “Señas de Identidad” y a aportar algunos datos e imágenes que he recogido sobre él.

Y va a continuación.









El asesinato de Julián Ortiz de Lazcano, 1936

El asesinato de Julián Ortiz de Lazcano, 1936

Julián Ortiz de Lazcano (1894-1936) 
Foto de 1922 en La Habana

En este valle se cometieron a partir del golpe militar de 1936 multitud de actos represivos. Represión aplicada a vecinos no combatientes, lejos del frente militar. Represión, siempre delictiva, que fue desde la multa al asesinato y se les aplicó exclusivamente por su ideología.

Y fueron responsables de esa represión, por su autoría, inducción, aprobación o consentimiento de esos delitos, otros vecinos o residentes en este valle.

Los crímenes y delitos se ocultaron en principio, se pretendieron justificar más tarde y se tratan de silenciar ahora. Los victimarios ni sus cómplices, no fueron nunca denunciados, nunca juzgados, nunca condenados.

No repararon los daños que causaron, no mostraron arrepentimiento público, ni pidieron perdón a sus víctimas.

Entendemos que es necesario pasar página, pero no es posible hacerlo sin haber leído esa página que, para ser leída, ha debido ser escrita, y, para ser escrita, han tenido que investigarse a fondo y esclarecerse los hechos ocurridos.

Solo así respondemos a ese derecho imprescriptible que tienen las víctimas y los pueblos a la VERDAD. 

(Fragmentos de la Declaración Institucional aprobada por cada uno de los cuatro ayuntamientos amescoanos en sesión de pleno municipal. Primavera de 2017)


Ver el documento completo.



Los narcisos despiertan al hayedo dormido

Los narcisos despiertan al hayedo dormido


Los narcisos despiertan al hayedo dormido. 

Nartzisoek lo dagoen pagadia esnatzen dute.


     Planta bulbosa  de floración temprana en nuestra zona  anunciando la llegada de la primavera. La flor es de color amarillo más o menos intenso. Crece en pastizales o en claros de bosque soleados.

    Es perenne, puesto que el bulbo continúa vivo tras la muerte de la planta.

    La hemos visto en dos especies: Narcissus pseudonarcisus en grupos numerosos y en hayedos y Narcissus minor, de menor tamaño, y de forma individualizada.  


 

    Es tóxico para el ser humano y para el ganado.

    Por su belleza han sido recolectados sus bulbos de ejemplares silvestres y replantados en jardines desde hace siglos y, más recientemnete, cultivados en viveros y comercializados.